La ergonomía y el trabajo en oficinas
La ergonomía es el conjunto de disciplinas cuyo objetivo es adecuar el puesto de trabajo a las
características de la persona que en él desempeña su actividad, pretende hallar la óptima relación entre las condiciones antropométricas del usuario y los elementos estáticos (mobiliario) que lo componen.
Dada la imposibilidad de que todas la personas que ocupan el mismo puesto de trabajo posean las mismas medidas, se usan unas generales y válidas para todos.
Asimismo, mediante la regulación de los mecanismos ajustables del propio mobiliario, se consigue una rápida adaptación a un mayor número de usuarios de características antropométricas distintas.
Para el diseño ergonómico de los puestos de trabajo se tiene en cuenta las siguientes
recomendaciones:
EL ESPACIO DE TRABAJO
La distribución en planta de la oficina se crea con el número de personas que trabajan, el número de visitantes, características del mobiliario y del local. Este reflejará las zonas de trabajo, despachos, estanterías, iluminación, entre otros
EL MOBILIARIO DE TRABAJO
Mesa de trabajo:
Se situará a la altura de los codos, tendrá un espacio para las piernas lo que permitirá l
a comodidad del usuario. La superficie será mate y de color claro suave.
Silla de Trabajo:
Debe cumplir con estos requisitos:
Asiento regulable y acolchado de material antitranspirante.
Respaldo del mismo material que el asiento, debe permitir su regulación.
La base de 5 brazos con ruedas permite libertad de movimientos y evita el vuelco accidental de la silla.
Reposapiés:
Si el usuario estando sentado no alcanza el piso, es deseable que se utilice un reposapiés que sea regulable en la altura e inclinación.
AMBIENTE LUMINOSO
Cada actividad debe tener una iluminación adecuada, un nivel de iluminación insuficiente o excesivo causan irritación de ojos, dolores de cabeza y errores en la ejecución de tareas.
Un buen sistema de iluminación debe conseguir que cada actividad disponga de nivel de iluminación adecuado, que principalmente está en función de:
El tamaño de los detalles a visualizar (exigencias visuales de las tareas).
Distancia entre observador y objeto observado.
Factor de reflexión de objeto observado.
Contraste entre el objeto y el fondo sobre el que destaca.
Posición de posibles obstáculos que proyecten sombras.
Uso ocasional o habitual de los espacios a iluminar.
CONFORT ACÚSTICO
Las interferencias en la conversación oral, las dificultades para interpretar claramente los mensajes telefónicos o la imposibilidad de concentrarse en tareas que exigen un esfuerzo mental importante son factores sonoros críticos en las oficinas, mucho más que en entornos industriales.
Estar sometido a niveles elevados de presión acústica además de causar sordera, interfiere en la conversación oral, dificulta interpretar los mensajes telefónicos y concentrarse en tareas
Los criterios de confort acústico se basan en la necesidad de disponer de unos límites recomendados de los ruidos de fondo de tal forma que no interfieran en el desarrollo de la actividad.
Los distintos criterios difieren poco entre sí, ya que suministran información y contenido espectral que debe exigirse a un ruido de fondo para que pueda desarrollarse confortablemente una actividad.
CONFORT TÉRMICO
La situación térmica en oficinas tiene que ser la necesaria para proporcionar comodidad. Esto depende de:
Temperatura del aire
Temperatura radiante media
Humedad relativa
Velocidad del aire
También influyen las características del vestido y la actividad física que se desarrolla.
El balance entre estos parámetros garantizará la comodidad de la mayoría de trabajadores.
CALIDAD DE AIRE
Los edificios cada vez son más herméticos, pero cuentan con los caudales adecuados de aire limpio, bien distribuido y climatizado, nos deberían proporcionar una calidad de aire adecuada. No en todos los casos es así y puede originar insatisfacción en los ocupantes.
Contaminantes en interiores
Dióxido de carbono por la respiración, partículas biológicos como pelo, escamas, etc.
Contaminantes interiores: materiales de construcción, humo del tabaco, productos de limpieza, pinturas, cosméticos, etc.
Contaminantes exteriores: procedentes del exterior como productos de combustión, polvo, polen, etc.
Estos no causarán problemas importantes, pero si incomodidad e irritaciones leves, las cuales desaparecen al abandonar el local.
¿Cómo podemos mejorar la calidad del aire?
Con buenos caudales de aire, climatizado y limpio.
Preservando en buen estado el sistema de climatización/ventilación.
Los edificios recién remodelados no se ocu
parán hasta después de un tiempo.
Limitar la generación de contaminantes en el interior.
Las tomas exteriores del aire estarán lejos de cualquier foco contaminante.